Dos de cada cinco mujeres en Chile ha sufrido agresiones físicas, psicológicas o sexuales en el último tiempo. Así lo revela el IV Encuesta de Violencia contra la Mujer en el Ámbito de Violencia Intrafamiliar y en Otros Espacios, realizada por la Subsecretaría de Prevención del Delito. La consulta detalla además un aumento estadísticamente significativo en relación a las mujeres que declaran haber sido víctimas de violencia alguna vez en su vida, ítem que aumenta de un 38,2% a un 41,4%.
Consultada sobre estas cifras, la presidenta de la ONG Acción Mujer y Madre Virginia Palma advirtió que esto se complejiza, pues cuando la víctima opta por denunciar, se encuentra una serie de obstáculos burocráticas y de prejuicios que impiden solicitar protección a las autoridades.
La activista social sostuvo que es muy complejo avanzar en medidas concretas en contra de la violencia intrafamiliar, cuando las organizaciones civiles no son escuchadas por parte de la institucionalidad que está, supuestamente, en favor de la mujer.
Virginia Palma abogó para que las entidades privadas como ONG o Fundaciones tengan la potestad y el apoyo suficiente para acoger y escuchar a las víctimas de violencia intrafamiliar, pues muchas veces las policías o el Ministerio Público son incapaces de cumplir a cabalidad esta misión.
Los datos más preocupantes de la IV Encuesta de Violencia en el Ámbito Intrafamiliar dan cuenta de un incremento significativo de la violencia sexual la cual sube un 2,1% a 2,8%. Además aumenta la a ocurrencia de agresiones en el espacio público de un 25% a 46,9%. Otro factor que resulta preocupante en este estudio es que cada vez son más las mujeres que reconocen haber sido objeto de algún tipo de abuso y malos tratos por parte de sus parejas, y ahora se atreven a contarlo o entienden que este tipo de conductas no deben ser naturalizadas.