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El legado político de Gladys Marín

(Por Norton Robledo, Comisión de Cultura Sociedad de Escritores de Chile, Filial Sech Sin Frontera, Asociación Víctor Jara y Chile Somos Todo ( CHISOTO ) Malmö Suecia). 

En el Chile de hoy cuando la contradicción del momento es entre neoliberalismo y democracia y que en el marco de las elecciones  municipales  que se realizarán el 11 de abril de 2021 y las elecciones de convencionales constituyentes, que se realizarán los días 10 y 11 de abril de 2021 para elegir a los integrantes de la Convención encargada de redactar una nueva Constitución Política de la República se da en el contexto de la lucha de clases expresada en su forma  política e ideológica entre los que luchan por ir ganando espacios en los municipios y por una Nueva Constitución para llevar a cabo los cambios estructurales que Chile necesita. Cambios sociales, políticos, económicos, culturales y ecológicos  . Expresado en el pacto Apruebo Dignidad, este está conformado por el Frente Amplio, la Federación Regionalista Verde Social, el Partido Comunista, Revolución Democrática, Convergencia Social, Comunes, Igualdad y movimientos políticos. Y la derecha que quiere mantener su espacio en los municipios, y con respecto a la Nueva Constitución, hacer solo cambios para  maquillar la actual Constitución, para seguir haciendo lo que han venido haciendo durante todos los años en que han estado en el gobierno, mantener, desarrollar y profundizar el neoliberalismo en Chile tanto los gobiernos de derecha como los gobiernos de la ex Concertación. Expresados en el Pacto La “lista del Apruebo” y “ Vamos por Chile “

En esta situación social y política es que el recuerdo de la vida, obra y legado político de Gladys Marín es más actual y vigente que nunca. Gladys  nos ha dejado un legado de consecuencia política claro y concreto, es un legado de lucha junto a los pobres, a los más sencillos. Una lucha por la libertad y la democracia popular,

Gladys renació entre las multitudes

Un mar de Banderas rojas y rojinegro  cubrían el cielo de Santiago el 8 de marzo del 2005, una multitud de un millón de personas, de participantes en su funeral que quedará registrado como unos de los más emotivos y multitudinarios de los últimos tiempos.

Gladys Marín falleció el 6 de marzo y renació el 8 Marzo para celebrar el día internacional de la mujer más concurrido y masivo en la historia de Chile y renació en las multitudes, en las Banderas verdes del Partido Humanista, en las banderas rojas y negras del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (Mir) y en las rojas del Partido y de Las Juventudes Comunista y de la Alternativa Socialista. Gladys renació a la vida en las consignas del pueblo, en los cantos del pueblo y sobre todo en las voces de los de abajo y con su canto de: »Gladys…Gladys querida, los de abajo jamás te olvidarán»

Ese 8 de Marzo el Partido Comunista de Chile,  le iba a entregar una flor a Gladys y el pueblo de Chile le entregó miles de flores y le entregó su corazón. Mientras marchábamos por las calles de Santiago de Chile no pude dejar de recordar que en 1969, hace 36 años entrábamos en sus calles en la marcha por Vietnam desde Valparaíso a Santiago (unos 150 kilómetros) marcha de la que Gladys fue una de las principales y más destacadas promotoras y organizadoras. Ahora ella iba también encabezando la marcha en su féretro mientras las banderas rojas se agitaban en los cielos de la ciudad y las gentes cantaban el Venceremos, el Himno del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, el Pueblo Unido, La Internacional, El Himno de las Juventudes Comunistas de Chile. Cuando el féretro se aproximaba al cementerio se comenzó a escuchar  la canción Coraje de Víctor Heredia.  Se sentía en el ambiente, se percibía la presencia de Gladys, yo imaginé su alma revoloteando como una mariposa alrededor de las banderas, de las pancartas y consignas. Entonces percibimos como ella renacía en las personas, en las gentes, en el pueblo, en las ideas y en la lucha por la democracia y el socialismo. Entonces se nos hicieron más clarividentes que nunca las palabras que ella nos dijera alguna vez:

«En mi vida hay amores, personas, ideas que amé y amo a las cuales dedico mis días y mis pasos. He viajado mucho, pero siempre con mi corazón y mi mente puestos en un lugar, en una historia de la liberación de las cadenas de explotación e injusticia que atan la vida de mi pueblo y los pueblos. Pero cada día es un descubrimiento de rutas, un volver a nacer, un sumergirse, un respirar de nuevo para seguir haciendo camino».

Gladys seguirá haciendo camino porque  ha dejado un legado de consecuencia política. Ya lo he dicho antes pero es bueno recordarlo, es un legado de lucha junto a los pobres, a los más desposeídos. Una lucha por la libertad y la democracia popular. Se dice que  “solo es vencido el que deja de luchar “. La lucha continúa por ganar los municipios para que el pueblo, los trabajadores, los de abajo y los del medio sigan ganando espacios que representen sus anhelos y sueños de un mundo mejor. La lucha continúa por una Nueva Constitución democrática, participativa y popular. Y para ello es de primer orden la organización, unidad, movilización y lucha de la izquierda consecuente y sobre todo de las organizaciones sociales. Gladys Marín,  la rosa roja del pueblo,  En este contento  estas palabras de Gladys Marín  son vigentes y actuales :

«El mundo hay que enfrentarlo con irreverencia y protesta. ¿Tenemos que hacernos sentir quiénes? Aquellos que señaló Martí: «los pobres de la tierra». Si, los pobres que son ricos de espíritu. Tenemos que transformar la realidad porque sin transformaciones políticas radicales será imposible el desarrollo económico, la soberanía nacional y la paz en el mundo»

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