· La investigadora Martina Cociña Cholaky aborda los avances y puntos pendientes en la materia.
La migración es una realidad cierta que requiere regulaciones nacionales e internacionales que no han caminado al ritmo del fenómeno que estĆ” presente en todo el planeta. Y Chile no estĆ” ajeno a esa realidad. SegĆŗn el Servicio de Migraciones de Chile (SERMIG), al 31 de diciembre de 2022 en nuestro paĆs vivĆan 1.625.074 extranjeros/as provenientes en su gran mayorĆa de Venezuela (532.715), PerĆŗ (250.908), Colombia (189.524), HaitĆ (184.724) y Bolivia (148.059), y el 93% del total de los migrantes residĆa en la Región Metropolitana.
En este escenario, la investigadora postdoctoral del Instituto de Ciencias Sociales (ICSo) de la Universidad de OāHiggins (UOH), Martina CociƱa, seƱala que es fundamental, al reflexionar sobre la temĆ”tica migratoria, abordarla ādesde una perspectiva integral, esto es, mĆ”s que visualizar a quienes se desplazan desde la óptica instrumental de costo-beneficio, comprenderlos como personas que, al igual que obligaciones, tienen derechos que deben ser garantizados y respetadosā.
La investigadora aclara que, en relación a las consecuencias que puede generar la movilidad humana en los paĆses receptores, estudios dan cuenta que āsi el porcentaje de inmigración internacional es mayor al 10% de la población, ello puede tener efectos en la economĆa del paĆs, lo que no es el caso chileno, ya que segĆŗn la Ćŗltima estimación publicada del Instituto Nacional de EstadĆsticas y SERMIG, las personas migrantes no superan el 8%ā.
Agrega que la literatura especializada seƱala que las personas migrantes se insertan en los mercados, presentando mayor tasa de empleabilidad que la población local, pero āa menudo desarrollan trabajos mal remunerados y en condiciones laborales precarias, esto se debe a una serie de barreras existentes, como la alta segmentación laboral, lo que se vislumbra -por ejemplo- con la migración de mujeres peruanas que, a pesar de contar con estudios, son contratadas āmayormente- en labores de aseo domĆ©sticoā.
PolĆtica pĆŗblica
La Dra. CociƱa seƱala que, al hablar de una polĆtica integral de migración, cabe considerar que āreciĆ©n desde los aƱos 90 la movilidad humana ha comenzado a estudiarse en Chile, con anterioridad las investigaciones eran mĆ”s bien escasas. Desde los aƱos 2000 en adelante la inmigración internacional se ha configurado como una preocupación, situĆ”ndose en la agenda pĆŗblica. Sin duda, el que sea un fenómeno sociocultural que ha causado reciente atención, incide en cuanto a las polĆticas que se han adoptado para abordarlosā.
La experta agrega que, como advierte la literatura especializada, -en general- si se examina el papel que ha cumplido el Estado de Chile a nivel gubernamental, āno se ha establecido una polĆtica integral de inclusión, sino mĆ”s bien medidas paliativas y restrictivas que responden a necesidades especĆficas de un Ć”mbito. Y por otra parte, se reconoce que podrĆan existir avances en la materia, como la dictación de una legislación (Ley 21.325 de 2021 del Ministerio del Interior y Seguridad PĆŗblica) que dejó sin efecto una normativa de antigua data (Decreto Ley 1.094 de 1975) que se sustentaba en la Doctrina de la Seguridad, y la reciente PolĆtica Nacional de Migración y ExtranjerĆa, que reconoce la necesidad de inclusión de las personas migrantes. No obstante, cabe vislumbrar cómo se aplicarĆ”n en la prĆ”cticaā.
Explica que desde 2018, Chile cuenta con una polĆtica migratoria que se expresa en la premisa Ā«Migración ordenada, segura y regularĀ» y bajo este lema, el segundo gobierno de SebastiĆ”n PiƱera (2018-2022), adoptó āuna serie de medidas que buscaban controlar el ingreso y permanencia de determinadas comunidades de extranjeros, imponiendo un tratamiento diferencial de las circulaciones.
En 2018 y 2019 se establecieron visas consulares, mediante decretos, a personas haitianas y venezolanas, pero por su escasa concesión, extensa tramitación y la gestión de la pandemia, se dificultó la entrada regular de estas personas. Debido a la falta de acceso por vĆas regulares, los ingresos irregulares se incrementaron y las travesĆas se precarizaron. El Estado chileno, entonces, se configura como productor de irregularidadā.
La investigadora postdoctoral afirma que el aumento de las restricciones para ingresar āse manifestó en la eliminación de la visa temporaria por motivos laborales en 2018, el Plan de Retorno āHumanitarioā, el fortalecimiento de los mecanismos para materializar las expulsiones y la adopción del Plan Frontera Segura en el norte del paĆsā.
AƱade que la polĆtica de militarización de las fronteras y la mediatización de las deportaciones es parte de una lógica de seguridad que ha optado por fortalecer el control de los desplazamientos imponiendo una gestión selectiva de los flujos. āUn panorama que no dista de las medidas establecidas por el presidente Gabriel Boric y que han reforzado la frontera nortina incrementando la dotación militar y declarando Estado de Excepción en la macrozona norte con un importante aumento presupuestarioā.
Normativa vigente
En Chile la polĆtica migratoria se expresa en instrumentos como la Ley de Migraciones y ExtranjerĆa y su reglamento (vigentes desde febrero de 2022), la Ley de Refugio de 2010 (N° 20.430) y la Ley Contra el TrĆ”fico IlĆcito de Migrantes y la Trata de Personas (N° 20.507). Asimismo, se manifiesta a nivel reglamentario en decretos y circulares dictadas en Ć”mbitos como salud y educación. TambiĆ©n es posible evidenciarla, de manera mĆ”s reciente, en la Ley de Infraestructura CrĆtica (N° 21.542).
āEstas regulaciones, entre otras, interactĆŗan e intentan responder al cambiante escenario de la movilidad, abordando los desafĆos que se presentan y solucionando algunos vacĆos existentes. Al mismo tiempo, sin embargo, dificultan el ejercicio de los derechos de quienes migran por su sectorialidad, parcialidad y condicionalidad, ademĆ”s de la burocratización y dispersión que las caracteriza. Constituyen, por lo tanto, un entramado regulatorio que expone la carencia de una polĆtica migratoria integral en Chileā, finaliza la investigadora UOH.