En vísperas de celebrarse el 1° de Mayo, Día Internacional de los Trabajadores, el secretario nacional de la Central Unitaria de Trabajadores CUT Chile, Eric Campos abordó la primera fase de implementación de la jornada laboral de 40 horas y expresó posiciones sobre el debate del valor del trabajo en Chile.
El dirigente destacó las indicaciones incorporadas por el ejecutivo sobre la titularidad sindical para definir la implementación de la ley, y la acción de la Dirección del Trabajo que dictaminó la disminución de 1 hora -y no minutos- en un día de la semana, si los trabajadores no llegasen a acuerdo con el empleador.
Tales acciones se sobrepusieron a la dificultades en la tramitación y aplicación de la ley, planteó Campos, ocasionadas por un empresariado ideológico y un parlamento que en general desconoce el funcionamiento del mundo del trabajo.
Si bien advirtió que no hay sindicatos en todas las empresas y que el código laboral otorga principalmente las prerrogativas al empleador, “estoy esperanzado porque se abrió una discusión nacional de la necesidad de trabajar menos, y se condenó transversalmente la actitud de un empresario ideológico”, expresó.
En esa línea, el también presidente de la Federación de Sindicatos de Metro, señaló que existe un intento por parte de este sector económico de mantener el código laboral heredado de la dictadura, a sabiendas que el debate de la jornada abre el de las condiciones laborales, cuya base jurídica vulnera los derechos laborales:
En relación al paro convocado por la Central el 11 de abril y que contó además con una amplia participación de organizaciones sociales, precisó que aquellas también se harán presentes en el acto central de la CUT este miércoles, como expresión del trabajo que buscan mantener para ampliar el espacio de articulación con los temas que son de interés de la ciudadanía como las demandas sociales.
Al respecto, Eric Campos también tocó la reciente celebración de la ENADE, acotando que hay un accionar directo en la política -sin caretas- de los grandes empresarios, lo que responde a una ideología donde no sólo les interesa ganar más, sino incluso, imponerse sobre el ejecutivo, precisó el dirigente.
Frente a eso, criticó que el sistema político solo tiene al capital empujando y no de la misma manera al trabajo.
Asimismo, Eric Campos señaló que la discusión sobre el salario mínimo debe tender al del salario vital y al del trabajo como un espacio habilitante. “Es un debate que esconde el valor que la sociedad le da al trabajo”, precisó el dirigente:
“Enfrentamos viejos problemas que se están profundizando”, expresó Campos. “El problema del salario y del capital es un problema que la izquierda y el movimiento social deben responder” -continuó- “si queremos participar de un proyecto político que ponga en el horizonte transformaciones profundas”.