[Podcast] Teólogo Álvaro Ramis aborda la elección del nuevo pontífice
Tras el fallecimiento del Papa Francisco, el mundo católico y el mundo entero espera el cónclave de cardenales que elegirán al nuevo pontífice el miércoles 7 de mayo.
En conversación, el teólogo y rector de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, Álvaro Ramis, analiza las tendencias que se juegan en esta elección como la que representada el legado reformista de Francisco, las fuerzas más conservadoras, e incluso, la influencia de fuerzas políticas externas como la ultra derecha internacional.
Antropólogos lanzan libro que refleja la visión de la muerte desde la fotografía funeraria
Como parte de un proyecto Fondart 2019, el libro busca poner en valor la identidad, memoria y prácticas funerarias del país, una publicación pionera en el ámbito de la fotografía mortuoria.
En la Sala Eloísa Díaz de la Casa Central de la Universidad de Chile se presentó el libro “Imágenes de la Muerte: Un acercamiento antropológico a la fotografía funeraria familiar en Chile (1875-1974)” escrito por los antropólogos Pedro Sepúlveda y Jazmín Cerebello con el objetivo de relevar el patrimonio de la fotografía fúnebre en Chile.
Este libro a través de la antropología visual rescata, documenta y reflexiona sobre estas imágenes, que han formado parte de los rituales de despedida y memoria en distintas épocas y contextos. Muchas de estas fotografías, frecuentemente invisibilizadas o relegadas al ámbito privado, constituyen un valioso testimonio cultural que permite observar cómo los grupos humanos han representado y abordado la muerte, revelando significados profundos sobre la identidad, la memoria y las prácticas funerarias en el país.
Así lo señala uno de sus autores, el antropólogo y también magíster en Gobierno y Sociedad Pedro Sepúlveda, quien desde su trabajo ha observado la relación entre memoria, ritualidad y muerte en contextos urbanos y comunitarios. A esto se suman también los aportes de Jazmín Cerebello, coescritora del libro, quien entrega su experiencia de más de siete años de investigación y docencia en patrimonio visual para la comprensión de los procesos de duelo y muerte presentes en el texto.
“Este trabajo es el primer esfuerzo de investigación en torno a este tema. Han habido algunas investigaciones que hablan sobre un caso específico en materiales, los álbumes fotográficos, pero es la primera investigación en Chile que hace una recopilación de un corpus de fotografía funeraria y lo analiza como tal” señaló Sepúlveda.
Cómo investigación en torno a la fotografía funeraria de carácter familiar, el libro se sitúa entre las décadas de 1875 a 1974. Como señala Pedro Sepúlveda, se escogieron estas fechas para aproximarse al tiempo donde la fotografía dejó de hacerse de manera profesional y pasó a realizarse en un contexto doméstico.
Esta técnica fotográfica llegó al país a mediados del siglo XIX, por medio de profesionales que brindan estos servicios en una época con una alta tasa de mortalidad en el continente y el mundo, en especial de los niños y jóvenes los cuales pocas veces alcanzaban a ser retratados en vida. En este sentido, estos registros eran almacenados por cercanos como recuerdo y testigo de su existencia.
Según expertos la estética de la fotografía fue cambiando con el paso de las décadas, en los inicios se puede apreciar registros en que los cuerpos eran retratados como si estuviera vivo o durmiendo evitando evidenciar el estado fallecido del cuerpo, en cambio, en otras imágenes realizadas en años posteriores era más normalizado mostrar a la persona muerta dentro del ataúd.
“Esto no es solo fotografía post mortem, sino que también es fotografía de un rito en general, entonces existen varias imágenes de carroza, en cementerio, ese tipo de cosas. La aproximación antropológica que nosotros le damos es la caracterización del objeto y la metodología”, agregó el antropólogo.
Para abordar el siglo de fotografías presentes en el libro, Cerebello y Sepúlveda llevaron a cabo un extenso trabajo de recopilación desde archivos institucionales y privados, tales como el Museo Histórico, el Archivo Nacional, el Servicio Nacional del Patrimonio Fotográfico, entre otros. Asimismo, con archivos privados como el de la Universidad Diego Portales, el de coleccionistas y algunos facilitados por familiares.
La publicación de este libro es resultado de un proyecto del Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes (Fondart), línea de investigación del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio 2019, quienes financiaron esta investigación originalmente pensada como una tesis de pregrado en antropología.
Un trabajo que destacan desde el Archivo Central Andrés Bello, quienes facilitaron imágenes de su colección Archivo Fotográfico para contribuir en la difusión en redes sociales del proyecto y digitalizaron algunas de estas imagenes. Al respecto, su directora Fernanda Vera, valoró el enfoque visual y puesta en valor sobre estos registros.
Según indicó la directora del núcleo patrimonial de la Universidad de Chile, “este libro nos permite acercarnos con respeto y altura de miras, a las formas en que los distintos grupos humanos representan y abordan estos procesos de despedida y duelo. Lo anterior nos permite tomar conciencia de los procesos identitarios, la memoria y las prácticas funerarias mediante el estudio de estos dispositivos fotográficos”, afirmó Fernanda Vera.
Día Internacional de la Danza se conmemora con una variada cartelera en distintas regiones del país
- Desde una intervención del Ballet de Santiago en el frontis del Teatro Municipal, a la primera edición del Ciclo Danza Inversa, de Fundación Santiago OFF, la conmemoración del Día Internacional de la Danza concentrará una serie de actividades a lo largo del país.
- La programación de este año incluye muestras, talleres, clases magistrales, laboratorios y espacios de encuentro e intercambio artístico que celebran la diversidad de las danzas en Chile.
Una intervención del Ballet de Santiago, en el frontis del Teatro Municipal de la capital, al mediodía de este martes 29, dará vida a la conmemoración de un nuevo Día Internacional de la Danza. Una fecha que, además, se celebra en el país con una amplia cartelera impulsada por organizaciones colaboradoras del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
El elenco que dirige César Morales Anderson, presentará un extracto de Bodies of división, un estreno mundial creado especialmente para la compañía, con la vibrante música de Las cuatro estaciones de Vivaldi, revisitadas por Max Richter y la coreografía de Pett|Clausen-Knight. En la instancia, además, se presentará por primera vez en la historia, el Ballet Juvenil del Municipal de Santiago, dirigido por la directora (s) de la Escuela Macarena Montecinos.
La intervención en el Teatro Municipal es una de las tantas actividades que, desde el fin de semana, se llevan a cabo en conmemoración del Día Internacional de la Danza. Un hito que se celebra cada 29 de abril, desde 1982, cuando fue instaurado por el Comité de Danza del Instituto Internacional de Teatro (ITI), en homenaje al natalicio de Jean-Georges Noverre, reconocido bailarín y teórico francés, considerado el creador del ballet moderno.
“Las actividades organizadas este año a lo largo del país, dan cuenta de una escena activa y comprometida no sólo con el fomento y exhibición de la danza, sino también con la creación de espacios de encuentro con la ciudadanía. El Día de la Danza ofrece una valiosa oportunidad para promover la apreciación, el interés y la práctica de esta disciplina, y destacar la riqueza de técnicas, estilos, lenguajes y formatos que se expresan en todo el país”, sostuvo la ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Carolina Arredondo Marzán.
Galas regionales en Alto Hospicio, Viña del Mar y Talca
Desde el fin de semana, diversas academias, escuelas y compañías de las regiones de Tarapacá, Valparaíso y Maule han llevado adelante actividades en torno al Día Internacional de la Danza.
El martes 29, a las 19 horas, el Teatro Municipal de Viña del Mar recibirá a la Gala Regional de Valparaíso, en la que más de 120 artistas, de diez elencos, se presentarán en escena. El encuentro reunirá a representantes de la Academia Nahid, Creadanza, Flor de Tumbe, Conservatorio Izidor Handler, Cuerpo en Movimiento, Mundomoebio, Shake Moves y The New Squad.
La instancia contará, también, con la presentación de Flamenco Triana, agrupación beneficiada por la primera edición de la convocatoria para Compañías de Trayectoria de Artes Escénicas del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
El sábado 26, en el Teatro Regional del Maule, se realizó una nueva edición de la Gala Regional. En el evento participaron el Ballet Folklórico Regional del Maule (BAFORE), el Ballet Folklórico Expresión Maulina (BAFOEM), entre otros elencos y exponentes de la zona.
La actividad, impulsada por la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio del Maule y la Mesa Regional de Artes Escénicas «Cambalache”, forma parte del Plan de Fomento Regional 2025, una estrategia financiada a través del Fondo de Artes Escénicas, que busca fortalecer el desarrollo de las disciplinas y sectores mediante el trabajo articulado entre seremis y agentes de cada territorio.
En la Región de Tarapacá, en tanto, se desarrolló la Gala Artística del Día Internacional de la Danza, que reunió a 15 escuelas y agrupaciones locales. Organizada por la Red de las Danzas de Tarapacá, con el apoyo de la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de Tarapacá, la gala se llevó a cabo en el Anfiteatro de la Plaza de Armas de Alto Hospicio.
Instancias formativas y de diálogo para celebrar la danza
El Día Internacional de la Danza también ha sido una oportunidad para participar de espacios de exhibición, formación e intercambio artístico en diversas regiones del país.
Dentro de estas iniciativas destaca la primera edición del Ciclo Danza Inversa, la nueva apuesta de la Fundación Santiago Off, que se desarrolló entre el 24 y el 26 de abril en el Centro Cultural Estación Mapocho. El ciclo ofreció talleres, espacios de diálogo y exhibiciones abiertas al público, convocando a artistas provenientes de la danza, la pintura, la performance y otras disciplinas.
La actividad, de acceso liberado, contó con el financiamiento del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio a través del Programa de Apoyo a Organizaciones Culturales Colaboradoras (PAOCC).
En el sur del país se realizaron variados encuentros para fomentar nuevas miradas sobre la danza contemporánea, fortalecer redes colaborativas y promover el cruce de saberes en torno al movimiento y la creación escénica.
Uno de estos hitos fue el de Araucanía en Movimiento, encuentro regional para artistas de la danza que se llevó a cabo el 26 y 27 de abril. La actividad reunió a elencos y agrupaciones que han impulsado el desarrollo de la disciplina en la región, e incluyó distintas clases y talleres con foco en la investigación y los procesos de creación.
Funciones en teatros, espacios y centros culturales del país
En la Región del Biobío, y por medio del trabajo articulado entre la Seremi de las Culturas en conjunto con la Mesa de Organizaciones Colaboradoras de Artes Escénicas, la celebración del Día de la Danza se extenderá entre el 25 y el 29 de abril, con una programación que incluye funciones, talleres e instancias de diálogo en la Sala 100 de Artistas del Acero y el Teatro Biobío (TBB). Dentro de esta cartelera destaca la exhibición de la obra “Nube”, de José Vidal y Compañía, quienes celebran 30 años de trayectoria y regresan con este montaje a la sala principal del TBB.
En tanto, en la Región de Los Lagos, los días 29 y 30 de abril se conmemorará el Día de la Danza con funciones en escuelas, teatros y centros culturales. Además, se ofrecerán talleres gratuitos de biodanza, ballet, flamenco y danzas afrodescendientes en Calbuco, Hornopirén, Puerto Varas y otras comunas.
La programación en Biobío y Los Lagos cuentan con el apoyo y financiamiento del Plan de Fomento Regional 2025.
El jueves 24 pasado, se presentó la obra “Absence”, en el Parque Cultural de Valparaíso. Se trata de un montaje emblemático del coreógrafo francés Claude Brumachon para la Compañía Movimiento. La función, que se realizó con acceso liberado, estuvo financiada por el Fondo de Artes Escénicas del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
En la Región Metropolitana, también se programaron actividades especiales por el Día de la Danza en Centro Nave, GAM, el Teatro Municipal de Santiago, Espacio La Vitrina, Teatro La Memoria, el Centro Cultural San Joaquín y la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, entre otras organizaciones dedicadas a la formación y difusión de la danza.
El detalle de estas y otras actividades está disponible en la cartelera de Chile Cultura.
Amnistía Internacional advierte crisis global de derechos humanos ante el “efecto Trump”
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El informe anual pone de manifiesto la deriva hacia prácticas autoritarias y crueles medidas represivas contra la disidencia en todo el mundo.
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Los primeros 100 días del presidente Trump en el cargo intensifican tendencias muy arraigadas y retrocesos que se produjeron en el mundo en 2024.
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La inacción global para abordar las desigualdades, el colapso climático y las transformaciones tecnológicas pone en peligro a las generaciones futuras.
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El aumento de las prácticas autoritarias y la pulverización del derecho internacional no son inevitables: la gente se resiste y se resistirá a los ataques contra los derechos humanos; los gobiernos pueden administrar justicia internacional y deben seguir haciéndolo.
La campaña del gobierno de Trump contra el reconocimiento de derechos está dando alas a tendencias nocivas ya presentes, vaciando de contenido salvaguardias internacionales de derechos humanos y poniendo en peligro a miles de millones de personas en todo el planeta. Así lo ha advertido Amnistía Internacional hoy, al presentar su informe anual, La situación de los derechos humanos en el mundo.
Este “efecto Trump” ha agravado el daño causado por otros dirigentes mundiales durante 2024, echando por tierra decenios de minucioso trabajo para construir y promover los derechos humanos universales para todas las personas y acelerando el hundimiento de la humanidad en una nueva era caracterizada por la mezcla de prácticas autoritarias y codicia empresarial, según ha declarado Amnistía Internacional en su evaluación de la situación en 150 países.
“Año tras año, hemos advertido de los peligros del retroceso de los derechos humanos. Pero los sucesos de los últimos 12 meses —especialmente el genocidio de la población palestina en Gaza, retransmitido en directo pero ignorado— han puesto de manifiesto lo infernal que puede ser el mundo para tantas personas cuando los Estados más poderosos dejan de lado el derecho internacional y prescinden de las instituciones multilaterales. En esta encrucijada histórica, en la que las leyes y prácticas autoritarias se multiplican por todo el mundo en interés de una pequeña minoría, los gobiernos y la sociedad civil deben trabajar urgentemente para llevar a la humanidad de vuelta a terreno seguro”, ha manifestado Agnès Callamard, secretaria general de Amnistía Internacional.
La situación de los derechos humanos en el mundo documenta la represión cruel y generalizada de la disidencia, la catastrófica escalada de los conflictos armados, los insuficientes esfuerzos por abordar el colapso climático y un creciente retroceso mundial de los derechos de las personas migrantes y refugiadas, las mujeres, las niñas y las personas LGBTI. A menos que se logre dar un drástico giro a la situación mundial, todos estos aspectos se deteriorarán aún más en un turbulento 2025.
“Transcurridos 100 días de su segundo mandato, el presidente Trump sólo ha mostrado un total desprecio hacia los derechos humanos universales. Su gobierno ha atacado con rapidez e intencionalidad esenciales iniciativas e instituciones estadounidenses e internacionales que se crearon para hacer de nuestro mundo un lugar más seguro y más justo. Su ataque sin cuartel a los conceptos mismos de multilateralismo, asilo, justicia racial y de género, salud global y acción climática necesaria para salvar vidas está agravando el considerable daño que ya han sufrido esos principios e instituciones, y animando aún más a otros dirigentes y movimientos contrarios al reconocimiento de derechos a unirse a su embestida”, ha añadido Agnès Callamard.
“Pero seamos claros: este mal es mucho más profundo que las acciones del presidente Trump. Desde hace años, hemos presenciado la insidiosa propagación de prácticas autoritarias entre Estados de todo el mundo, fomentadas por aspirantes y dirigentes en ejercicio que actúan deliberadamente como motores de destrucción. Mientras nos arrastran a una nueva era de convulsión y crueldad, todas las personas que creemos en la libertad y la igualdad debemos prepararnos para luchar contra ataques extremos al derecho internacional y a los derechos humanos universales.”
La proliferación de leyes, políticas y prácticas autoritarias dirigidas contra la libertad de expresión, asociación y reunión pacífica que Amnistía Internacional documentó en 2024 fue un elemento fundamental del retroceso global de los derechos humanos. Gobiernos de todo el mundo trataron de eludir la rendición de cuentas, afianzar su poder e infundir miedo prohibiendo medios de comunicación, disolviendo o suspendiendo ONG y partidos políticos, encarcelando por cargos infundados de “terrorismo” o “extremismo” a quienes los criticaban, y criminalizando a defensores y defensoras de los derechos humanos, activistas por el clima, personas que se manifestaban en solidaridad con Gaza y otras voces discrepantes.
Las fuerzas de seguridad de varios países utilizaron detenciones arbitrarias masivas, desapariciones forzadas y, a menudo, fuerza excesiva —en ocasiones letal— para reprimir la desobediencia civil. Las autoridades de Bangladesh dieron orden de “disparar sin previo aviso” contra protestas estudiantiles y con ello causaron casi un millar de muertes, mientras que las fuerzas de seguridad de Mozambique, tras las controvertidas elecciones, desataron la peor represión de protestas que se había visto en años, y que se saldó con al menos 277 muertes.
Turquía impuso prohibiciones generales de las protestas y sigue utilizando fuerza ilícita e indiscriminada contra personas que se manifiestan pacíficamente, pero, en países como Corea del Sur, el poder de la ciudadanía prevaleció cuando el presidente Yoon Suk Yeol suspendió ciertos derechos humanos y declaró la ley marcial, sólo para ser después destituido de su cargo y ver cómo esas medidas eran anuladas tras las protestas públicas masivas.
Los conflictos armados ponen de manifiesto fallos reiterados
A medida que los conflictos se multiplicaban o intensificaban, las fuerzas estatales y los grupos armados actuaban descaradamente, cometiendo crímenes de guerra y otras violaciones graves del derecho internacional humanitario que han hecho trizas las vidas de millones de personas.
En un informe histórico, Amnistía Internacional documentó el genocidio de Israel contra la población palestina en Gaza, y el sistema israelí de apartheid y ocupación ilícita de Cisjordania se hizo cada vez más violento. Mientras tanto, Rusia mató en 2024 a más civiles ucranianos que en el año anterior, y siguió atacando infraestructuras civiles y sometiendo a las personas detenidas a tortura y desaparición forzada.
Las Fuerzas de Apoyo Rápido de Sudán infligieron una violencia sexual generalizada contra mujeres y niñas, en lo que constituyen crímenes de guerra y posibles crímenes de lesa humanidad, mientras que el número de personas internamente desplazadas por los dos años de guerra civil de Sudán ascendió a 11 millones: más que en ningún otro punto del planeta. Sin embargo, la indiferencia hacia ese conflicto fue casi global; sólo suscitó interés en los actores cínicos que aprovecharon la oportunidad para violar el embargo de armas a Darfur.
La comunidad rohinyá siguió sufriendo ataques racistas en Myanmar, que obligaron a muchas personas a huir de sus hogares en el estado de Rajine. Los recortes masivos del gobierno de Trump a la ayuda humanitaria exterior han agravado desde entonces la situación, provocando el cierre de hospitales en campos de refugiados de la vecina Tailandia, exponiendo a la deportación a defensores y defensoras de los derechos humanos que habían huido del país, y poniendo en peligro programas que ayudan a la población a sobrevivir al conflicto.
La suspensión inicial de la ayuda exterior estadounidense también afectó a los servicios de salud y apoyo para los niños y niñas separados a la fuerza de sus familias en campos de detención de Siria, y los abruptos recortes han obligado a cerrar programas que salvaban vidas en Yemen, como por ejemplo el tratamiento contra la malnutrición para niños y niñas, mujeres embarazadas y madres lactantes, los refugios para supervivientes de violencia de género y la atención médica para niños y niñas que sufren cólera y otras enfermedades.
“Amnistía Internacional lleva mucho tiempo advirtiendo del doble rasero que socava el orden basado en reglas. El impacto de ese retroceso, imparable hasta la fecha, alcanzó nuevas cotas en 2024, desde Gaza hasta la República Democrática del Congo. La comunidad internacional, que había allanado el camino hacia este caos al no defender universalmente el Estado de derecho, ahora debe asumir su responsabilidad”, ha manifestado Agnès Callamard.
“El coste de estos incumplimientos es descomunal; por ejemplo, la pérdida de salvaguardias vitales para proteger a la humanidad tras los horrores del Holocausto y la Segunda Guerra Mundial. A pesar de sus múltiples imperfecciones, el desmantelamiento del sistema multilateral no es la respuesta. Hay que reforzarlo y replantearlo. Sin embargo, tras ver cómo en 2024 se le infligían más daños, ahora el gobierno de Trump parece tener la intención de hacer trizas los restos de la cooperación multilateral para remodelar nuestro mundo a través de una doctrina transaccional impregnada de codicia, egoísmo cruel y dominio por parte de una minoría.”
Los gobiernos están abandonando a las generaciones futuras
La situación de los derechos humanos en el mundo presenta pruebas claras de que el mundo está condenando a las generaciones futuras a una existencia cada vez más penosa a causa de la inacción colectiva para abordar la crisis climática, revertir las desigualdades cada vez más profundas y restringir el poder de las empresas.
La COP29 fue una catástrofe, con una cantidad récord de grupos de presión en favor de los combustibles fósiles que inhibieron el progreso hacia una eliminación gradual y justa de estos combustibles, mientras los países más ricos acosaron a las naciones de bajos ingresos para que aceptaran unos acuerdos de financiación climática irrisorios. La temeraria decisión del presidente Trump de abandonar el Acuerdo de París y su mantra “vamos a perforar y perforar” no han hecho más que agravar esta inacción y podrían animar a otros a seguir su ejemplo.
“El año 2024 fue el más cálido desde que se tienen registros, y el primero que superó el umbral de 1,5 °C de calentamiento con respecto a los niveles preindustriales. Las inundaciones que devastaron Asia meridional y Europa, las sequías que asolaron el África Austral, los incendios que arrasaron franjas de la selva amazónica y los huracanes que causaron estragos en Estados Unidos dejaron claro el inmenso coste humano del calentamiento global, incluso en sus niveles actuales. Con un calentamiento previsto de 3 °C para final de siglo, las naciones más ricas saben que no son inmunes a desastres no naturales cada vez más extremos, como se vio claramente con los recientes incendios de California, pero… ¿actuarán?”, ha manifestado Agnès Callamard.
En 2024, la pobreza extrema y la desigualdad dentro de los Estados y entre ellos siguieron intensificándose a causa de la inflación generalizada, la escasa regulación de las empresas, los abusos tributarios generalizados y las crecientes deudas nacionales. Sin embargo, muchos gobiernos y movimientos políticos utilizaron una retórica racista y xenófoba para culpar a las personas migrantes y refugiadas de la delincuencia y el estancamiento económico. Mientras tanto, el número y la riqueza de las grandes fortunas aumentó, pese a que el Banco Mundial advirtió de “una década perdida” en la reducción global de la pobreza.
El futuro se presenta mucho más sombrío para numerosas mujeres, niñas y personas LGBTI, con ataques cada vez más intensos contra la igualdad e identidad de género. Los talibanes impusieron restricciones aún más draconianas a la existencia pública de las mujeres en Afganistán, mientras que las autoridades iraníes intensificaron su brutal represión de las mujeres y las niñas que desafiaban el uso obligatorio del velo. Los grupos de mujeres que buscan a seres queridos desaparecidos en México y Colombia sufrieron todo tipo de amenazas y ataques.
Malawi, Malí y Uganda tomaron medidas para tipificar como delito o prohibir las relaciones consentidas entre personas adultas del mismo sexo, mientras que Georgia y Bulgaria siguieron el ejemplo de Rusia respecto a la represión de la supuesta “propaganda LGBTI”. El gobierno de Trump está impulsando el retroceso mundial de la justicia de género al desmantelar las iniciativas que abordan la discriminación, atacar implacablemente los derechos de las personas transgénero y poner fin a la financiación de los programas de salud, educación y otras cuestiones que apoyaban a mujeres y niñas de todo el mundo.
Los gobiernos están dañando más a las generaciones actuales y futuras al no regular adecuadamente las nuevas tecnologías, abusar de las herramientas de vigilancia y afianzar la discriminación y las desigualdades mediante el uso creciente de la inteligencia artificial.
Las empresas tecnológicas llevan mucho tiempo facilitando prácticas discriminatorias y autoritarias, pero el presidente Trump ha agravado esta tendencia al animar a las empresas de redes sociales a retirar protecciones —incluida la eliminación por parte de Meta de la verificación de datos por terceros— y redoblar la apuesta por un modelo de negocio que permita la propagación de contenido violento y de odio. La alineación entre el gobierno de Trump y los milmillonarios tecnológicos también amenaza con abrir la puerta a una era de corrupción descontrolada, desinformación, impunidad y captura del poder del Estado por parte de las empresas.
“Desde sentar a milmillonarios tecnológicos en lugares destacados en su ceremonia de investidura hasta otorgar al hombre más rico del mundo un acceso sin precedentes al aparato gubernamental estadounidense, parece que el presidente Trump va a permitir a sus aliados empresariales, que actúan guiados por sus propios intereses, campar a sus anchas, sin la más mínima consideración hacia los derechos humanos o incluso el Estado de derecho”, ha manifestado Agnès Callamard.
Esfuerzos decisivos por defender la justicia internacional
A pesar de la creciente oposición de Estados poderosos —agravada este año por las vergonzosas sanciones del gobierno de Trump contra el fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI)—, la justicia internacional y los órganos multilaterales han seguido presionando para que se rindan cuentas al más alto nivel, y ha habido gobiernos del Sur Global que han liderado importantes iniciativas.
La CPI dictó órdenes de detención contra altos cargos estatales y dirigentes de grupos armados de Israel, Gaza, Libia, Myanmar y Rusia. La ONU dio un importante paso para negociar un tratado, sumamente necesario, sobre los crímenes de lesa humanidad, y Filipinas hizo otro tanto al detener el mes pasado al expresidente Rodrigo Duterte en aplicación de una orden de la CPI por el crimen de lesa humanidad de asesinato.
La Corte Internacional de Justicia (CIJ) dictó tres conjuntos de órdenes de medidas cautelares en la causa que Sudáfrica presentó contra Israel en virtud de la Convención sobre el Genocidio, y emitió una opinión consultiva en la que declaraba que la ocupación israelí de territorio palestino, incluida Jerusalén Oriental, es ilícita. La Asamblea General de la ONU también aprobó una resolución en la que pedía que Israel pusiera fin a su ocupación, y en enero de 2025 ocho Estados del Sur Global formaron el Grupo de La Haya, un colectivo comprometido con impedir las transferencias de armas a Israel y hacer que este país rinda cuentas por las violaciones del derecho internacional que ha cometido.
“Aplaudimos los esfuerzos que realizan naciones como Sudáfrica y los órganos de justicia internacional para plantar cara a Estados poderosos decididos a socavar el derecho internacional. En una situación de impunidad tan complicada, esas naciones y esos órganos constituyen ejemplos que el mundo entero debería seguir. Los crecientes ataques que hemos presenciado contra la CPI en los últimos meses sugieren que este ámbito está emergiendo como un gran campo de batalla en 2025. Todos los gobiernos deben hacer cuanto esté en su mano para apoyar la justicia internacional, hacer rendir cuentas a los perpetradores y proteger a la CPI y a su personal frente a las sanciones”, ha manifestado Agnès Callamard.
“A pesar de los enormes desafíos, la destrucción de los derechos humanos dista de ser inevitable. La historia está llena de ejemplos de personas valientes que han vencido a prácticas autoritarias. En 2024, la población de varias naciones rechazó en las urnas a dirigentes contrarios al reconocimiento de derechos, mientras que millones de personas de todo el mundo alzaron la voz contra la injusticia. Así que está claro. No importa quién se interponga en nuestro camino: debemos seguir —y seguiremos— oponiendo resistencia a los implacables regímenes basados en el poder y los beneficios que intentan privar a la gente de sus derechos humanos. Nuestro enorme e inquebrantable movimiento estará siempre unido en torno a nuestra creencia común en la dignidad y los derechos humanos inherentes a todas las personas de este planeta.”
Información complementaria:
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Informe Anual 2024-2025 de Amnistía Internacional https://amnistia.cl/informe-
anual-2024-25/