Jorge Kreyness, encargado de relaciones internacionales del Partido Comunista Argentino, realizó una mirada a fondo del momento político que vive Argentina en las vísperas del balotaje o segunda vuelta de las elecciones presidenciales, en donde se confrontarán el ultraderechista Javier Milei y el candidato representante del Peronismo y sectores populares, Sergio Massa, que el Partido Comunista Argentino decidió apoyar.
El analista y dirigente comunista argentino comenta que el país trasandino vive una situación de hiperinflación acumulada de un 103,2% y un desempleo cercano al 40%, estas condiciones de presión extrema a la clase trabajadora han sido el terreno fértil para la incubación de una postura, extrema que capitalizó la ultraderecha con la figura de Javier Milei, un personaje excéntrico, ultra liberalista, con rasgos fascistas y misóginos.
En las elecciones del pasado 22 de octubre, el candidato Sergio Massa se impuso como la primera mayoría relativa, quedando con 36,7% de los sufragios. Jorge Kreyness señala que hubo un gran intento del progresismo y de todas las fuerzas de centro y de izquierda, “ante el peligro que ganara el gobierno la candidatura ultraderechista”.
En ese sentido, dentro del Partido Comunista Argentino, también primo la idea de frenar al fascismo y apoyar a Sergio Massa.
La principal demanda que levanta el Partido Comunista Argentino, para contribuir con sus votos al candidato Sergio Massa, es el desconocimiento de la deuda con el Fondo Monetario Internacional, por considerarla “ilegal, ilegítima y fraudulenta”, y, por otro lado, comenta que levantan la mayoría de las reivindicaciones del pueblo.
Kreyness agrega, que la rabia inicial de las elecciones primarias, fue contrarrestado por el miedo que provocaron las ideas y la postura de Milei, lo que termino configurando un fuerte sentimiento antifascista.
El sentimiento nacionalista y la cultura argentina de defensa de los derechos adquiridos, comenta el dirigente comunista argentino, ha logrado enfrentar a la figura emergente de la ultraderecha. Dicha diferencia se ve acrecentada por diferentes escisiones de movimientos, partidos o figuras políticas tradicionalmente de derecha, quienes han manifestado que no apoyarán al candidato ultraderechista, entre ellos: La Unión Cívica Radical y Generación para un Encuentro Nacional.
Agustín Rossi, quien va como candidato a la vicepresidencia, de Sergio Massa. Es un militante de la corriente nacional de la militancia del Peronismo, más cercano a las ideas de izquierda y por sobre todo al Kirchnerismo. “Tiene un grado de amistad con el Partido Comunista, hemos trabajado y seguimos trabajando. Lo que expresa la heterogeneidad de la coalición”, comenta Kreyness.
Entre los partidos de derecha tradicional y centro-derecha, ya comenzaron a negociar puestos de gobierno, en conjunto con condicionar su apoyo a Sergio Massa, lo que va configurando un panorama auspicioso para la derrota de la ultraderecha.
Concluyendo su explicación a fondo del panorama eleccionario argentino, Jorge Kreyness, comenta que, si esto fuera un tema aritmético, Javier Milei ganaría sin problema, pero tanto el miedo a las ideas extremistas, como la idiosincrasia argentina de derechos sociales garantizados por el Estado han logrado parar en principio al fascismo y hacen que todo esté en incertidumbre de cara al balotaje o segunda vuelta presidencial, el próximo 19 de noviembre.