Desde el pasado viernes, la Central Unitaria de Trabajadores está en negociaciones con el Ejecutivo para el aumento del sueldo mínimo que hoy se mantiene en $320.500.
En el marco de este debate, la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, aclaró que el gobierno no puede seguir anclado en la política contra cíclica de los 90 y 2000, descargando los costos de cada crisis en los trabajadores.
En ese sentido, la líder de la multisindical dijo que un impuesto a los súper ricos es el mejor mecanismo para romper con la lógica de medidas insuficientes e hiper-focalizadas a la hora de enfrentar contingencias como la actual.
Bárbara Figueroa criticó que el Gobierno optara por comprometer recursos del Estado hasta 2022, en vez de generar nuevos recursos y una mayor liquidez mediante el impuesto a las grandes fortunas del país, que además es una medida aplicada en muchos países del mundo.
La presidenta de la CUT remarcó que el impuesto a los súper ricos es una opción concreta para palear los efectos de la crisis social y económica, en un contexto donde el Gobierno no garantiza políticas de ayuda con sostenibilidad en el tiempo.
Finalmente, Bárbara Figueroa llamó al ejecutivo a acoger la propuesta de un impuesto a las mayores fortunas de Chile, a objeto de poder garantizar un ingreso básico de emergencia, que sea universal y sostenible en tiempos de crisis.
"Hemos seguido profundizando en la necesidad de proteger el empleo y que eso no sea contradictorio con la necesidad de asegurarle capacidad de consumo y poder adquisitivo a los trabajadores" explicó nuestra presidenta tras la segunda reunión sobre #SalarioMínimo realizada hoy👇 pic.twitter.com/G3us8149Qj
— CUT Chile ✍️🗳 (@Cutchile) August 13, 2020