Frente al emplazamiento hecho por Sebastián Piñera y el ministro de la Segpres respecto a ponerle “presión “al Parlamento para apurar la tramitación de varios proyectos de ley”, el presidente del Partido Comunista, diputado Guillermo Teillier, salió al paso de estas expresiones señalando que fue el propio Ejecutivo quien durante un año sumió al Congreso en una verdadera “sequía legislativa”.
Del mismo modo, el timonel comunista afirmó que el apoyo de la Democracia Cristiana y el partido Radical a proyectos como las reformas tributaria y de pensiones, echan por tierra los argumentos de obstruccionismo con que Piñera intenta ocultar su falta de diálogo y entendimiento con el Congreso.
Guillermo Teillier acusó una campaña permanente del Ejecutivo de arrinconar y culpar al Congreso en la lentitud que han sufrido varias iniciativas de ley, olvidando que fueron ellos mismos desde el oficialismo, quienes promovieron estos supuestos acuerdos nacionales los cuales pretendían legislar a espaldas de ambas cámaras.
Del mismo modo, el diputado Guillermo Teillier advirtió que Sebastián Piñera omite maliciosamente en su discurso, que es el gobierno quien debe instalar la urgencia de los proyectos de ley y acoger oportunamente las indicaciones que hacen los parlamentarios a estas propuestas, incidiendo así en lo expedito de la elaboración de las normas.
Así mismo, el presidente del Partido Comunista calificó como populista y tendencioso el anuncio del gobierno en torno a reducir el número de parlamentarios, pues lo que realmente se busca es disminuir la influencia del Congreso e impedir que representantes de los pueblos originarios puedan contar con escaños y una representación efectiva en el Poder Legislativo.
Finalmente el diputado Guillermo Teillier sostuvo que si Sebastián Piñera y su administración tuvieran un real interés en agilizar la función del Congreso y hacerla más cercana a la ciudadanía, podrían abrirse al debate sobre la constitución de un parlamento unicameral, así como a la disminución de la dieta de los legisladores, ambas propuesta que seguramente ni él ni la derecha que lo apoya están depuestos a aprobar, concluyó.