Un incierto panorama aqueja a cerca de 250 estudiantes y sus familias, luego que se anunciara el cierre de la escuela José Bernardo Suárez en la comuna de Renca.
El centro educativo está ubicado en la antigua Población Lourdes y ha desarrollado un trabajo educativo por más de seis décadas formando a varias generaciones de niñas y niños del sector.
Días atrás apoderados del colegio se manifestaron en la Avenida Balmaceda de la comuna levantando una alerta sobre esta situación, a la vez que denunciaron las malas prácticas administrativas que hoy hacen inminente el cierre del establecimiento.
“Nos quedamos para cuidar el proyecto”
“Como comunidad educativa son 68 años entregando el servicio a los pies del cerro Renca con un colegio muy familiar y pequeño que nació para cubrir la necesidades de educación, de cuidado, de recreación por una profesora de esa época con mucha vocación en su servicio. Es la primera escuela subvencionada de la comuna”, reseña su directora Julia Becerra.
La autoridad del plantel educativo señala que desde el año 2022 denunciaron delitos laborales y económicos como el no pago de cotizaciones y salarios, “pero no sucedió nada” por parte de las autoridades fiscalizadoras:
El año pasado la Superintendencia de Educación dispuso una administración provisional para regularizar los incumplimientos laborales, no obstante, esa intervención ha venido aparejada del cierre de la escuela:
“Sentimos que cuando denunciamos nos auto castigamos porque la solución es el cierre, no dan otra posibilidad”, precisó la directora acotando que el interés de la comunidad es salvar el proyecto educativo que ha logrado prosperar en una valiosa y destacada trayectoria formativa.
“Nuestros niños tienen cara, rostro, historia. Tenemos el control de la escuela de una manera inclusiva antes de que empezara esto del SAE. Siempre hemos sido inclusivos, nunca hemos hecho ninguna distinción. Trabajamos con todos los niños que nos llegan, pero para las autoridades no somos importantes porque somos un número y en este caso somos un número negativo”:
De acuerdo a los antecedentes disponibles, ya en 2018 la superintendencia informó que el sostenedor de ese entonces no acreditó la disponibilidad de los saldos de las subvenciones percibidas en dicho año, existiendo una diferencia de más de $24 millones.
“Cuando llega la escuela en manos del sostenedor actual producto de una herencia y de que su madre fallece, asume la representación legal y comienza a provocar estas situaciones”, agrega describiendo la profunda crisis desatada donde incluso, docentes dieron término a sus contratos.
“Siete profesores se fueron de la escuela y se auto despidieron por todas las condiciones en las que estábamos: tres meses sin sueldo y cotizaciones impagas. Los que nos quedamos lo hacemos por cuidar el proyecto”.
En Chile desde 2015 se han cerrado más de 700 colegios, encabezando las cifras los establecimientos particulares subvencionados de la Región Metropolitana.
Para Julia Becerra la crítica a la institucionalidad no representa para nada una defensa corporativa: “No defendemos de ninguna manera al sostenedor anterior, él hizo una mala gestión que nosotros denunciamos, pero no podemos permitir que la solución del Mineduc sea el cierre de una escuela”, dijo apuntando a la Ley de Inclusión Escolar:
“Eso dice que la ley es la que tiene que cambiar porque mientras sea punitivamente económica o que hagan un descuento por años y no pase nada más hasta que sea el cierre, nos dice que algo está funcionando mal, que no debiese ser ese camino, pues se le está negando el derecho a los apoderados que elijan la escuela para sus hijos”.
“Llegaremos hasta el Presidente”
La directora de la José Bernardo Suárez, también indicó que han seguido buscando alternativas reuniéndose con autoridades y agentes del área. Uno de ellos ha sido el alcalde de Renca, Claudio Castro con quien se congregaron la semana pasada:
“Estamos viendo con algunos concejales alternativas de apoyo”, acotó también. “Llegaremos hasta ministro si es posible, hasta el Presidente porque ni en este ni en ningún gobierno se deben cerrar escuelas, debe seguir dándole oportunidades”.
“Los responsables y los garantes de que exista una educación de calidad y que los recursos de todos los chilenos se ocupen de una manera favorable en educación y no se usen en otras cosa es el Estado”.
“El cierre es una medida macabra. No puede ser el futuro de 215 familias, de una comunidad de 30 docentes que defendemos este proyecto inclusivo. Nuestra misión, Yo te recibo, te educo y te formo para el mañana, está siendo coartada”, puntualizó la jefa educativa de la escuela.