El “Informe Desafíos y Recomendaciones para el Ecosistema Biotecnológico en Chile” es resultado del trabajo de una Comisión Ministerial que, durante 100 días, elaboró un total de 15 propuestas en base a seis ejes fundamentales para nuestro país. El evento de entrega del documento fue la primera actividad del ministro de Ciencia, Aldo Valle Acevedo.
Con la presencia de autoridades, representantes del mundo académico, sector privado y sociedad civil, el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (MinCiencia) presentó en dependencias de la Sociedad de Fomento Fabril (SOFOFA), el “Informe Desafíos y Recomendaciones para el Ecosistema Biotecnológico en Chile”, un documento que propone una hoja de ruta para transformar a esta arista de la ciencia en un eje estratégico de desarrollo nacional.
Este evento se convirtió en la primera actividad del nuevo Ministro de Ciencia, Aldo Valle Acevedo. “Este hito habla muy bien de un Estado que avanza en modernización, contribuyendo como catalizador de energías, de recursos, de capacidades nacionales. Cada vez que nos sentamos con alguien que tiene una idea distinta, crecemos. Y los países obviamente tienen la oportunidad, las economías se pueden hacer más vigorosas cuando efectivamente ponemos el acento allí donde es posible marcar diferencias”, fueron sus primeras palabras.
El recién llegado Ministro, también agradeció la confianza del Presidente de la República, Gabriel Boric, a su juicio “una señal nítida del esfuerzo que hace el país por modernizar el Estado”. “Que en esta institucionalidad demos lugar a la articulación de las capacidades y esfuerzos de la sociedad civil con la institucionalidad pública, es también otra señal que yo celebro poder conocer, concurrir a ella, y quería por lo mismo también estar presente para agradecer el trabajo de los comisionados”, agregó.
“Estamos construyendo una política de Estado. Porque estamos convencidos que Chile tiene condiciones únicas como lo son su enorme biodiversidad, su excelente capacidad científica y empresas sólidas y comprometidas para desarrollar soluciones biotecnológicas con valor agregado. Este informe nos permite mirar el contexto actual para avanzar hacia una estrategia país que combinará ciencia, desarrollo productivo y sustentabilidad”, señaló el subsecretario de MinCiencia, Cristian Cuevas.
El informe, que se puede descargar desde el sitio web de MinCiencia, identifica seis pilares fundamentales: Gobernanza, regulación, infraestructura, formación, financiamiento e internacionalización.
En el ámbito de la regulación, propone habilitar marcos normativos ágiles, seguros y actualizados, que reduzcan la incertidumbre a la hora de innovar en esta área. En materia de financiamiento, propone cerrar brechas en investigación y desarrollo (I+D), escalamiento tecnológico y acceso a capital de riesgo, incorporando además incentivos específicos para fomentar la inversión. Respecto de la formación, recomienda desarrollar capital humano técnico y estratégico en áreas clave, con programas especializados, atracción de talento y vinculación temprana con la industria y centros de I+D. En cuanto a infraestructura, propone impulsar la inversión pública y privada en infraestructura habilitante para el desarrollo, validación y escalamiento de tecnologías biológicas, incluyendo plantas piloto, laboratorios certificados y centros de pruebas. En el pilar referido a la internacionalización, se busca conectar a Chile con estándares, redes, mercados e inversión global en biotecnología e I+D, facilitando la inserción de soluciones nacionales en cadenas de valor internacionales. Por último, en cuanto a gobernanza, se busca fortalecer la institucionalidad y los mecanismos de coordinación pública.
La elaboración de este documento de 70 páginas fue liderada por la Comisión Asesora Ministerial sobre Biotecnología, instancia que agrupó a representantes de la academia, la industria y Empresas de Base Científico-Tecnológica (EBCT) del sector biotecnológico nacional quienes entregaron un total de 15 recomendaciones, que buscan proporcionar insumos para la formulación de una estrategia y políticas públicas que impulsen el desarrollo y la aplicación de la biotecnología en Chile, garantizando su uso ético y responsable.
Formación, valor de mercado y futura Estrategia Nacional
El subsecretario Cristian Cuevas añadió “con estas recomendaciones de los y las comisionadas, buscamos dinamizar la biotecnología en Chile y queremos posicionarnos como una potencia bioeconómica”. “Estas recomendaciones de las y los comisionados nos permitirán consolidar la estrategia nacional de biotecnología. Para avanzar hacia un desarrollo productivo sostenible, la ciencia y la tecnología son necesarias. La manera en la que nuestro país logre diversificar y sofisticar su matriz productiva y avanzar también de manera más equitativa, es a través de la ciencia y la tecnología y en esto la biotecnología, sin duda, jugará un papel crucial”, destacó.
En los últimos cinco años, ANID y Corfo han destinado más de 147 mil millones de pesos al desarrollo de la biotecnología en Chile, inversión que ha permitido la creación de más de 30 centros y consorcios distribuidos a lo largo del país, la adjudicación de más de 200 proyectos de I+D, 300 becas de postgrados (nacionales e internacionales) y el apoyo a más de 145 iniciativas de EBCT’s a través de los programas CIU y Start-Up Ciencia.
Rosario Navarro, presidenta de SOFOFA, destacó la conformación de la Comisión Ministerial de Biotecnología, una instancia que se convierte “en una clara señal de que estamos dando pasos concretos para posicionarnos como un país que apunta a la innovación, a la ciencia y la tecnología”.
“Estamos convencidos que la transformación es un acto colectivo que se valora profundamente porque manifiesta una positiva y necesaria colaboración público privada. Estamos ante un momento decisivo. Las tecnologías emergentes están redefiniendo a gran velocidad las reglas del juego a nivel global. Es nuestro deber como país habilitar para que estas herramientas que están en desarrollo se desplieguen y permitan desarrollar soluciones creativas, eficientes y más competitivas. La biotecnología se destaca por su capacidad de modificar industrias completas y responder a los desafíos actuales. Chile tiene la oportunidad de transformarse en un polo regional de innovación biotecnológica, aprovechando nuestras ventajas en biodiversidad y además las capacidades científicas en áreas como la agricultura, la acuicultura, la salud y la minoría sustentable”, indicó Navarro.
El informe completo está disponible en el sitio web del Ministerio de Ciencia y se convierte en el documento base para la próxima elaboración de la Estrategia Nacional de Biotecnología.