En las recientes elecciones de Turingia y Sajonia, dos estados ubicados en la parte oriental de Alemania, la mayoría de los votos fueron para el Partido de extrema derecha, Alianza para Alemania, situación que marca nuevamente una preferencia hacia esa fuerza política en Europa.
El economista, Andrés Solimano, señaló que hubo resultados similares en otros momentos electorales dentro del continente, como los ocurridos en la Unión Europea, Francia e Italia.
Al intentar comprender estos resultados, explicó que el país pasa por una situación cercana a lo recesivo:
“Por los menos en trimestres anteriores comparados con el año 2023, el crecimiento de la producción, de las ventas y del empleo es débil, y eso castiga a los gobiernos que están en el poder”, señaló, al mismo tiempo que apuntó al alto número de migración -cercano a los 2 millones de personas- que han llegado hasta el país producto de diferentes conflictos armados.
“Este surgimiento de la extrema derecha y de los partidos más radicalizados de izquierda -nacionalistas- es producto de esta situación de desigualdades regionales, de acceso al empleo y de la política internacional”, sostuvo Solimano señalando que Alemania es la principal economía de la UE con casi el 20 % del PIB total, y de un destacado sector manufacturero que alcanza el 23%, mayor al de EEUU y el de Reino Unido, precisó.
Agregó además que en ese país pronto habrá elecciones estaduales en Brandeburgo y generales de autoridades el 2025. “Lo que sucedió en estos dos Estados puede ser un predictor de lo que suceda”, advirtió el economista.
Nacional
En relación a Chile, Solimano mencionó las dificultades que presenta la reactivación del sector de la construcción y de la vivienda, producto de nuevas preferencias habitacionales que surgieron tras la pandemia de 2020.
“Los últimos datos de permisos de edificación muestran que están en los puntos más bajos desde la década de los 90″, informó Solimano. “También hay un stock de viviendas, oficinas y casas que las empresas no han podido vender. Sin embargo, tampoco se puede olvidar el costo del crédito y la actitud de la banca que ha restringido o ha puesto más condiciones a los créditos hipotecarios”.
“Una situación parecida ocurre en el plano laboral”, señaló el especialista. donde el desempleo le ha costado bajar y donde hay un situación de informalidad: desde la gente que trabaja sin contratos, o bien, trabajadores cuyos empleadores no acceden a cumplir con las cotizaciones llegando a acordar acuerdos informales”.
“En términos legislativos hay que consignar que se han aprobado cuatro leyes importantes: la ley de 40 horas, el salario mínimo, la ley contra el acoso y maltrato laboral y la de conciliación en la empresa”.
“Hay una agenda ligado a los temas laborales, y detrás de ellos, condiciones macroeconómicas y complejidades del sector de la construcción y manufacturero que está tras esta situación”, observó el especialista.