Tras el acto oficial que por los 50 años del Golpe realizó el gobierno, el académico y Premio Nacional de Humanidades y Ciencias Sociales, Manuel Antonio Garretón, compartió un balance de la trascendental conmemoración que describió como contradictoria en tanto presentó aspectos muy positivos, pero también otros que incluso comprometen al pleno desarrollo de la democracia.
Destacó el Plan de Búsqueda como un valioso avance que sitúa al Estado como principal entidad responsable en la búsqueda de las víctimas de desaparición forzada. También se refirió a la declaración de duelo oficial por parte del gobierno que implicó reconocer la muerte del presidente Allende legítimamente elegido, provocada por el bombardeo a La Moneda y por el Golpe militar que terminó con la democracia, expresó.
También destacó que aunque no haya consenso, hay un acuerdo sobre el Golpe como causa de la violación a los derechos humanos, del Golpe y la instalación del estado de terror. “Eso es un avance que marca aquello en lo cual tiene que irse pensando en el futuro, como la falta de reconocimiento por parte de los sectores que dieron el Golpe”, señaló.
“Lo negativo es que no hay un reconocimiento estricto de la derecha acerca de condenar los crímenes, lo que es muy grave porque se establece una amenaza permanente de romper con la democracia, quedando entregado al juicio de las condiciones de los golpistas”, sostuvo.
Por otra parte, el académico apuntó a las posiciones de la ciudadanía y de las nuevas generaciones en función de una división generada por la falta de consensos democráticos fundamentales: “Si es que no hay un consenso en el Nunca Más respecto al Golpe, independiente de sus causas, este será un país dividido”.
Respecto a la figura de Allende y a su rol político en la historia reciente indicó que aquel ha quedado como el estadista “que intentó llevar a cabo una transformación muy profunda de la sociedad en democracia y que no se produjo en las fuerzas que lo apoyaban, la necesaria unidad férrea en torno a ese liderazgo”.
De esta manera consideró que el presidente de la Unidad Popular sí tendría responsabilidad en la crisis política al igual que todos los actores políticos, en cambio, la responsabilidad del Golpe “la tienen los instigadores, los que lo ejecutan y los cómplices. El golpe estaba planificado desde el comienzo y antes que Allende asumiera” aclaró.