Sin acuerdo en las cifras concluyó la serie de reuniones sostenidas entre el Ministerio de Hacienda y la Central Unitaria de Trabajadores, a propósito del reajuste al salario mínimo.
Sin embargo para la presidenta de la multigremial Bárbara Figueroa se logró instalar en la agenda la protección del empleo y la condición de que aquellas empresas que postulación a subsidios estatales en este tiempo de pandemia, no sean aquellas que apliquen prácticas antisindicales o despidos injustificados.
La líder sindical expresó que si hay alguien en Chile que no solidariza con esta crisis económica y social, son los empresarios, pues ellos han impedido lograr un reajuste salarial razonable y capaz de activar con fuerza nuestra la economía.
Bárbara Figueroa aclaró que lo que apuntan desde el mundo de los trabajadores es a un Ingreso Familiar de Emergencia que alcance los 400 mil pesos y para ello era importante que el gobierno hiciera un esfuerzo mediante un reajuste que permitirá llegar a este objetivo en medio de esta pandemia.
La presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores adelantó que ahora se seguirá debatiendo el reajuste al salario mínimo ahora en el Congreso, sin embargo advirtió que si el gobierno no quiere que este sea un camino tortuoso, debe colaborar para que los empresarios, sobre todo aquellos que se han enriquecido en este periodo, asuman su responsabilidad social para con Chile, concluyó Bárbara Figueroa.