No se comprende que un país con un extenso territorio longitudinal como Chile, carezca de un sistema ferroviario no de calidad, sino de excelencia. Hasta hace unos años… sí había de Santiago a Puerto Montt ese servicio, también numerosos ramales. Todo lo eliminaron, lo destruyeron, lo saquearon. Descarrilaron … el patrimonio de la nación. Solamente un dato histórico: En 1851 en el país había 81 kilómetros de vías férreas; en 1913, 8.883 kilómetros. El tren era un vehículo de integración social y cultural.
Contar con ferrocarriles es estratégico en cualquier país del mundo. Tanto que se pregona desde aquí que estamos ‘ en el umbral del desarrollo ‘… ¡ naranjas ! Es asunto de ver cómo están las cosas : educación, salud, Sename, pensiones, seguridad; estafas, injusticias, corruptelas, decadencia es lo que prevalece.
Si se mira los países de verdad desarrollados, se observará que en ellos el sistema de transporte es estatal-público, considerado el tren. De tanto copiar desde acá, que alguna vez se copie lo útil, lo bueno, lo ejemplar. Algunos en Chile ven el tren como asunto del pretérito, en Europa es realidad veloz del presente y del futuro.
En la región central del país existe un caso que raya en lo insólito, en verdad patético. Es la situación del ya mítico tren ‘ exprés ‘ Santiago-Rancagua – que ahora llaman Metrotren -. Desde el proyecto inicial ya cursan irritantes años. Hace un tiempo desde las esferas directivas del proyecto se dijo que ‘ faltaban recursos ‘ ( ¡ qué manera de proyectar los presupuestos ! ). Seguramente por Angostura ya el dinero no era el mismo… Con certeza los vagones adquiridos están oxidados.
Se dijo hace unos años que habría tren Santiago-Puerto Montt, que se contaba con 3 mil millones de dólares para tal inversión. Debates y estudios hubo en el parlamento, el resultado : ni toros ni arena; ni durmientes ni rieles ; y un ministro fue a la cárcel por unos días…
Este país con una bella geografía y gigantesco potencial no ha estado en buenas manos, y carente de fértil imaginación. Todo subastado, sus riquezas, su patrimonio.¡ Pobre Patria ! Tenemos tanto y, sin embargo, tan poco tenemos.
De tantas marchas y protestas que a diario surgen, que una alguna vez sea para demandar ¡ Ferrocarriles del Estado de y para Chile !
Por: Carlos Poblete Ávila
Profesor de Estado
Chile, junio de 2018