Con funciones presenciales, se conmemora el medio siglo de “Un Verano Feliz”

Durante mayo se cumplen 50 años del estreno de “Un Verano Feliz”, cortometraje que durante el gobierno de la UP promocionaba las Villas de Turismo Social o “balnearios populares”. Ocurrido el Golpe de Estado, su director Alejandro Segovia ocultó el filme. En 2021, tras su restauración, la película fue exhibida en internet. Se trata de la única producción sobreviviente del otrora Departamento de Cine y TV de la Central Única de Trabajadores (CUT).

Según lo investigado, Un Verano Feliz se presentó por primera vez, ante una nutrida audiencia, en mayo de 1972 en Valparaíso. Así lo ha relatado Tegualda Tapia, actriz del cortometraje que, en aquellos años estudiaba Teatro en la sede porteña de la Universidad de Chile, al igual que el otro protagonista, Samuel Villarroel. La proyección ocurrió en la Escuela de Derecho, en calle Errázuriz.

Ha sido uno de los criterios para considerar mayo como el de principal conmemoración del medio siglo de la película. El otro es el Mes de las Trabajadoras y Trabajadoras. El cortometraje, que combina elementos del documental y la ficción, fue dirigido por Alejandro Segovia y producido por el Departamento de Cine y TV de la Central Única de Trabajadores (CUT).

En sus casi 25 minutos, a todo blanco y negro, y con una banda sonora donde se escucha música de Víctor Jara, Los Blops y Charo Cofré, entre otros, Un Verano Feliz promovía las Villas de Turismo Social, también conocidas como “balnearios populares”. Se trataba de instalaciones construidas por el Estado para el descanso y recreación de obreros y sus familias, en especial durante la temporada estival.

Hasta 1973, funcionaron dieciséis de estos balnearios, ubicados desde el extremo norte hasta la región del Bio Bio. Varios se localizaron en la costa central chilena, en localidades como Pichidangui, Los Vilos, Papudo, Loncura, Ritoque, Puchuncaví, Las Cruces y Rocas de Santo Domingo.

Es, precisamente, en este último balneario donde se rodaron escenas de Un Verano Feliz, con una familia obrera -personificada por Tegualda Tapia y Samuel Villarroel-, vacacionando con sus hijos, como nunca antes pudieron hacerlo. Era el objetivo de la medida nº 29 del programa de la UP que buscaba fomentar la recreación y el turismo popular.

Tras el 11 de septiembre de 1973, Alejandro Segovia escondió el rollo de 16 mm. en un rincón de su casa, en el barrio de Playa Ancha, Valparaiso. Así estuvo durante años. En los ’90, junto a algunos colaboradores, realizó un traspaso a VHS y luego, probablemente a inicios del 2000, lo migró a digital, almacenándolo en un DVD artesanal. Ambas copias se exhibirían en circuitos alternativos. También se distribuiría de mano en mano. Segovia fallecería en 2014. Un par de años después, una versión en baja calidad de Un Verano Feliz fue subida a youtube por Daniela, su hija. Llegó a tener cerca de 80
mil visitas en un breve período.

En 2021, gracias a un financiamiento desde el Fondo de Fomento Audiovisual, la cinta fue restaurada y digitalizada en 2K por el Laboratorio de la Cineteca Nacional chilena. También se mejoró el sonido e imprimieron dos copias en 35 mm, en Labodigital, de México.

Debido a la pandemia, el reestreno de este material histórico debió realizarse por internet, en fechas sucesivas, junto a la Cineteca Nacional de Chile, el Museo de la Memoria y los DDHH, la Escuela de Cine de la Universidad de Valparaíso, el Parque Cultural de Valparaíso, el Festival Internacional de Cine Recobrado y el Centro Cultural San Antonio, junto a la Fundación por la Memoria.

Es remarcable este vínculo. Tras el Golpe, el balneario popular de Rocas de Santo Domingo fue ocupado por el Ejercito. Allí se instaló la escuela de instrucción de la DINA, y luego, fue convertida en centro clandestino de detención. Innumerables militantes y simpatizantes de izquierda fueron torturados, algunos asesinados y desaparecidos durante los años 70, como lo ha investigado el periodista Javier Rebolledo, en su libro El Despertar de los Cuervos (2014).

En enero pasado, gracias al mejoramiento en las condiciones sanitarias, la copia restaurada de Un Verano Feliz, en 35 mm. se presentó por primera vez ante público en el Parque Cultural de Valparaíso. Fue un momento histórico que, ahora, durante mayo, se pretende ampliar.

 

Las exhibiciones presenciales de Un Verano Feliz en sus 50 años, vienen así:

Jueves 19 de mayo. 18:30. Aula Magna. Escuela de Derecho, Universidad de Valparaíso.

Viernes 20 de mayo, 19 horas. Museo de la Memoria y los DDHH, Santiago.

Domingo 29 de mayo. 17 horas. Centro Cultural San Antonio.

Todas las funciones son gratuitas, con entrada liberada y aforo limitado. Se pedirá pase de movilidad. Habrá conversatorios tras cada exhibición, con protagonistas de estas historias.

Más información en: https://unveranofeliz.cl/  y en https://matildeaudiovisuales.wordpress.com/